¿Por qué nos encanta tener el control de las cosas? CONTROLADORES

15.06.2022

El deseo de control puede tener su origen en el miedo a la incertidumbre. A veces, también puede estar relacionado con una condición de salud mental.

Tener el control de tu vida suena como algo positivo y, en la mayoría de los casos, puede serlo, pero para algunas personas, la necesidad de controlar todo puede volverse abrumadora.

Si sientes la necesidad de controlar todas las cosas y eventos a tu alrededor, es posible que te consideres un perfeccionista y te exijas a ti mismo (y a los demás) estándares muy altos.

Quizás tiendes a tener problemas para sobrellevar las cosas cuando las cosas no salen según lo que tú planeaste o sufren cambios inesperadamente, incluso, puedes de repente encontrarte dando vueltas o teniendo pensamientos rumiantes de las mismas situaciones mientras buscas recuperar la sensación de control.

Como la mayoría de los aspectos de la salud mental, las conductas de control existen dentro de un espectro, la mayoría de las personas los experimentamos a cierto nivel pero cuando se rebasa ese nivel podríamos encontrarnos en serios problemas, una necesidad persistente de controlar cada situación puede afectar tus relaciones y tu salud mental, y a medida que trabajas en el manejo de esa necesidad de control, puede ser útil saber de dónde proviene la tendencia, es decir ¿Por qué tienes esa necesidad de control?

Un deseo o necesidad persistente de control puede estar relacionado con la dificultad para aceptar la incertidumbre, al tratar de ejercer control sobre todos los aspectos de una situación, puedes estar tratando de crear una sensación de seguridad y previsibilidad.


Esta necesidad de sentirse seguro y en control puede, a su vez, provenir de:

Eventos traumáticos: Una historia de trauma (exposición personal a un suceso o sucesos lo suficientemente intensos como para poder procesarlos e integrarlos de manera adecuada) puede tener un gran impacto en muchos aspectos de tu vida, también podría resultar en una profunda necesidad de control.

Cuando vives con un trauma, puedes quedar atrapado en distorsiones cognitivas como el catastrofismo que nos lleva a imaginar los peores escenarios posibles, lo cual nos conduce a alimentar una serie de creencias irracionales que terminan afectando nuestras actitudes, comportamientos y decisiones.

También podrías estar hipervigilante, lo que puede hacer que la incertidumbre sea muy inquietante. La hipervigilancia es un estado de mayor alerta en el que puedes revisar o vigilar continuamente tu entorno esperando peligro.

Al tratar de controlarlo todo, podrías comenzar inconscientemente a tratar de protegerte de volver a experimentar un trauma.

Experiencias de la infancia: El entorno en el que creciste puede afectar la forma en que ves el mundo.

Por ejemplo, crecer en una familia con un estilo de crianza ambivalente, en donde era difícil predecir lo que sucedería, puede conducir a comportamientos de control como mecanismo de afrontamiento.

Vivir con tutores que tuvieron un trastorno por consumo de alcohol o sustancias también puede afectar tus relaciones y comportamientos como adulto, los niños en este entorno a menudo tienen que enfrentarse a situaciones impredecibles y más adelante, como adultos, pueden sentir una intensa necesidad de controlarlo todo.

Crecer con cuidadores emocionalmente inaccesibles también podría resultar en la necesidad de controlar sus interacciones con otras personas en un intento de obtener seguridad y validación. Por ejemplo, el estilo de apego ansioso está relacionado tanto con cuidadores primarios impredecibles como con una tendencia a ser controlador en las relaciones.

Trastornos de ansiedad y TOC: La incertidumbre puede significar que hay más espacio para la preocupación y la rumiación intensas, las personas pueden calmarse tratando de controlar tantos resultados como les sean posibles para reducir esta preocupación.

La necesidad de control puede manifestarse de manera diferente, según el tipo de trastorno de ansiedad con el que vivas, por ejemplo, si tienes un trastorno de ansiedad social, puedes sentir la necesidad de planificar todos los detalles de las interacciones sociales, los cambios de última hora en estos planes pueden hacerte sentir extremadamente molesto.

Con el trastorno de ansiedad generalizada, puedes anticipar posibles desencadenantes, lo que también podría resultar en comportamientos de control.

Las personas con Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) también pueden tener una fuerte necesidad de controlar todo en un intento por reducir su ansiedad y sus miedos, también pueden enfrentar constantemente pensamientos intrusivos e irracionales que los llevan a participar en acciones específicas, llamadas compulsiones, para calmar la ansiedad que les causan esos pensamientos, estas compulsiones a menudo van de la mano con una necesidad de control.

Trastornos de personalidad: En ocasiones, una necesidad excesiva de control puede ser un síntoma de ciertos trastornos de personalidad, las personas con trastorno límite de la personalidad (TLP), por ejemplo, pueden sentir miedos intensos al abandono, lo que podría llevarlas a querer controlar sus interacciones y a sus parejas románticas en un esfuerzo por evitar que las dejen.

Algunas personas que viven con Trastorno Narcisista de la personalidad también pueden involucrarse en comportamientos de control, como usar tácticas de manipulación para dirigir las situaciones a su favor.

Comportamientos aprendidos: A veces, sentir la necesidad de controlar las cosas puede no estar relacionado con una condición, es posible tener una tendencia a controlar los comportamientos si esto es algo que presenciaste y experimentaste constantemente cuando eras más joven.

Por ejemplo, si tuviste un padre que supervisó o controló todo lo que comías o hacías puede llevarte a repetir estos patrones cuando seas adulto.

Tal vez encuentres tranquilidad al repetir estos comportamientos, o tal vez asumas que así es como se deben manejar las cosas en tu vida, también podrías asociar el control en ciertas situaciones con el cuidado de los demás.

Es importante buscar ayuda si sientes que tu necesidad de control está afectando tus relaciones, tu propia imagen y otros aspectos de tu vida, es posible que desees comunicarte con un profesional de la salud mental.

La psicoterapia puede ser una herramienta útil para ayudarte a obtener una perspectiva de tus patrones de pensamiento y lo que puede estar causando tu miedo a la incertidumbre o la necesidad de control.

Un terapeuta también puede trabajar contigo para explorar la raíz por la que necesitas controlar las cosas, ya sea que se base en una afección de salud mental o en un mecanismo de defensa.

La incertidumbre es parte de la vida, pero puede ser más difícil de manejar para algunas personas, esta dificultad podría conducir a una intensa necesidad de controlar todo lo que te rodea.

Las experiencias de todos con el control de las cosas, son únicas, y en todos los casos, es posible superar tu necesidad de control con tan solo identificar esta tendencia en ti mismo.


By Federico Schuster