Los "Si yo hubiera..." pensamientos muy comunes que pueden causarnos ansiedad.

06.12.2020

¿Y si hubiera continuado en aquel trabajo en el cual estaba conforme y cómodo, en lugar de decidirme a tomar ese riesgo que no tuvo tan buenos resultados?

¿Si hubiera confiado en aquel negocio que me propusieron?

¿Y si no me hubiera mudado a una ciudad más pequeña que en la que vivía?

Desde que somos niños comenzamos a tomar nuestras propias decisiones y a medida que vamos creciendo podemos hacerlo de manera más autónoma, con menos limitaciones y se supondría más apegadas a lo que realmente deseamos o necesitamos.

Ha habido desde hace tiempo una discusión en torno al concepto del "libre albedrío" el cual propone que somos libres para tomar nuestras decisiones, pensadores como Schopenhauer, Marx, Nietzsche y Spinoza han sostenido y justificado que los individuos están sujetos a toda clase de limitaciones que no les permiten actuar con total libertad, incluso Friedrich Schiller propuso que el ser humano es, en su inicio, "no libre" debido a que actúa con base en principios religiosos, éticos, morales y sociales, y que al entrar estos en el espectro racional no puede existir esa libertad plena.

A pesar de lo anterior, limitados o no, es a partir de nuestra adolescencia que comenzamos a tomar decisiones trascendentes para nuestra vida, grandes amistades, gustos musicales, de vestimenta, aventuras, viajes y proyectos de vida surgirán de este periodo.

Existen elementos que también en esta etapa comenzarán a rondar por nuestra mente, la duda, la incertidumbre, la inseguridad y el arrepentimiento son algunos de ellos y esa combinación entre decisiones e inseguridades darán lugar a lo que conocemos como: pensamiento contrafactual.

El pensamiento contrafactual es lo que comúnmente conocemos como los "si yo hubiera...", se trata de hipótesis mentales de disyuntivas que pudieron haber sucedido en el pasado, pero que finalmente no sucedieron.

Seguramente te has preguntado, en determinada situación, ¿Qué hubiera pasado si hubieras elegido una opción diferente? ¿Cómo serían las cosas ahora? Pues esto es muy común pero en algunas personas puede llegar a ser más recurrente incluso en rangos patológicos.

Estudios recientes han vinculado a los pensamientos contrafactuales con los llamados "Big Five Personality traits" o Los cinco grandes rasgos de personalidad afirmando que el pensamiento contrafactual es más frecuente en personas más sociables ya que son más proclives a imaginar los eventos posteriores de las situaciones que podrían haber sucedido y no sucedieron, asimismo, este tipo de personas, tienden a centrar su atención para evadir posibles riesgos, resultando más analíticos en acontecimientos pasados.

La versión contraria a los pensamientos contrafactuales son los pensamientos prefactuales, estos son simulaciones mentales de las cosas que irán a pasar, en el futuro, si tomamos ciertas decisiones; son también muy comunes pero de igual forma pueden llegar a ser patológicos según su periodicidad.

En los estudios antes mencionados se demostró que el pensamiento prefactual está más presente en individuos con tendencia menos neurótica, mayor amabilidad y mayor extroversión, en otras palabras, las personas menos neuróticas y con mayores habilidades sociales, a menudo piensan más en opciones potenciales a las situaciones futuras.

Como arma de doble filo aparecen los pensamientos contrafactuales ya que en una realidad actual exitosa, abundante o de autorrealización pueden hacernos sentir bien u orgullosos de las decisiones tomadas, pero ante una realidad actual confusa, desafortunada o precaria podrían llevarnos a cuadros depresivos, frustración o abulia.

Y mientras tanto los pensamientos prefactuales pueden llevarnos a estados de ánimo que causen ansiedad o estrés ya que centrar nuestros pensamientos en un futuro desconocido puede llevarnos de manera inútil y ociosa a escenarios en los cuales no querríamos estar.

En conclusión, me parece que todos podemos sentir la nostalgia de días pasados, recordar, imaginar y también podemos soñar con el futuro, fantasear e ilusionarnos, es válido y muy humano y llega a ser hasta aspiracional, el problema sería entonces estancarnos en estos pensamientos.

La Gestalt es una corriente psicológica humanista cuyo principal figura y fundador fue Fritz Perls, su significado en alemán es "forma" y promueve el aprender a vivir aquí y ahora, ocupándose del presente, dejando de imaginar, fantasear o proyectar, solamente experimentando con lo real.

Perls, dejó, entre muchas, este par de citas que parecería hay que tomar muy en cuenta:

"La angustia es la brecha entre el ahora y el después"

"La angustia siempre es el resultado del alejarse del ahora"

Parecería que lo importante es la experiencia y aprendizaje que nos han dejado y nos dejarán las situaciones que vivamos así que a priori o posteriori, vivamos en el presente sin olvidar nuestro pasado y avanzando con convicción hacia nuestro futuro.

By Federico Schuster